Un cambio en las condiciones de los acuerdos de inversión en diversas compañías europeas de cable por parte de Microsoft ha bastado para que cese su investigación sobre presiones para que éstas adoptasen sus decodificadores.
La Comisión Europa está prestes a cerrar la investigación que sobre las inversiones de Microsoft en la industria europea de la televisión por cable lleva realizando. La medida se toma después de que el gigante estadounidense aceptara modificar algunos de sus pactos comerciales y erradicar así la posibilidad de dominio en el sector que veía Bruselas.
«Microsoft se ha mostrado de acuerdo en modificar su relación con dos de sus colaboradores para atajar influencias indebidas sobre la selección de los decodificadores para televisión por cable», según informa la autoridad antitrust europea en un comunicado. «Al Comisión está satisfecha con estas modificaciones y las considera satisfactorias para dar por finalizadas las investigaciones sobre la implicación de Microsoft en los mercado digitales emergentes en Europa».
Los decodificadores de televisión por cable, conocidos como «set-top boxes», suponen una de las formas más prometedoras para llevar una nueva gama de servicios al mundo de la televisión. La Comisión decidió investigar al gigante del software por sus aportaciones estratégicas de capital en determinadas operadoras de cable, lo que le hizo pensar que quizás podrían crear cierta presión sobre las mismas a la hora de elegir el proveedor de estos terminales.
En los casos de la holandesa UPC y de la británica NTL, la Comisión descubrió que las inversiones de Microsoft vinieron acompañadas de recomendaciones sobre cuál era la mejor plataforma para poner en marcha los nuevos servicios de cable. Microsoft niega haber hecho ningún tipo de recomendación.