Vattenfall, el principal suministrador de electricidad del mercado sueco, también está probando llevar la banda ancha a los enchufes de las viviendas. En una primera fase se trata de 500 hogares en una isla que antes de 2002 va a tener acceso a 2,4 Mbit/s en las dos direcciones compartido entre 20 hogares. Las pérdidas anteriores de Vattenfall dentro del área de nuevos negocios (Sensel entre otras cosas) ha resultado en mucha precaución dentro de la dirección de la empresa.
A la vez la tecnología es muy cara. Una unidad de un módem de red y un amplificador cuesta 500-600 euros. – El precio tiene que llegar a 100 euros para tener una penetración seria dice Tomas Eklund, director técnico de Vattenfall Connection. Otro problema es que las empresas eléctricas han probado la banda ancha a través de los enchufes en escalas muy pequeñas, ya cuando se aumenta el volumen esto demanda soluciones de conexión de fibra y radio entre los centros de transformación y las centrales donde se sitúen los nodos ATM de gestión del tráfico. Otra amenaza del proyecto de Vattenfall es la rápida expansión del ADSL de Telia, dice.