Bill Gates, presidente y fundador de Microsoft, aprovechó ayer su paso por Madrid para promocionar la gran apuesta del gigante del software durante el próximo año: el dispositivo inalámbrico Table PC. Nuestra reputación está en ello, recalcó Gates a una pregunta de LA GACETA. En la misma respuesta, el coloso empresarial vaticinó que el Table PC cambiará la vida de los usuarios ya que, entre otros hábitos, duplicará el número de horas que la gente pasa frente a un ordenador, indicó.
En opinión de Gates, el Tablet PC compendia en un producto lo mejor de los teléfonos móviles y de los ordenadores portátiles. También añadió que la nueva tecnología, cuya comercialización se iniciará el próximo año, aumentará la eficacia de sus usuarios y ahorrará casi un tercio del tiempo de las reuniones. Representará un cambio tremendo en la forma en la que interactuamos con los sistemas informáticos.
En su particular descripción del futuro digital que se avecina, Gates aseguró que los ordenadores y dispositivos móviles (PDAs y teléfonos móviles) funcionarán con sistemas operativos que filtrarán las llamadas o correos electrónicos indeseados, para que nada interrumpa la actividad profesional de su usuario. Todo lo anterior conduce a la conclusión de que el elemento clave del próximo decenio es el software, resumió Bill Gates, sin duda el primer interesado en que el futuro se cumpla según sus expectativas.
Sistemas abiertos
A media mañana de ayer, el empresario estadounidense presidió en el Palacio de Congresos de Madrid el Developer Day 2000. En dicho foro de desarrolladores de software, el chairman detalló la estrategia.net de Microsoft y del compromiso con el estándar XML. Ante centenares de informáticos, Gates reconoció que el éxito futuro de la industria pasa por los sistemas abiertos, sin tarifas, cuotas ni autorizaciones.
Ante los profesionales de la informática, Gates comparó el Table PC con el patrón oro de la comunicación de congresos que supuso la utilización del programa Power Point en las presentaciones públicas de información. Para despedirse, Gates aseguró que su compañía corre muy poco riesgo de que el Tablet PC no sea una realidad comercial el próximo año. Dicho esto, Gates cruzó Madrid para almorzar con una nutrida representación de los empresarios y personalidades del mundo financiero en un conocido hotel de la capital. Allí expuso la ponencia titulada La década digital y respondió a una decena de preguntas de los asistentes.
Con el eco de los aplausos en la sala, Gates abandonó el hotel con destino a su avión privado. Allí embarcó sin perder un minuto para extender su apostolado corporativo en otra ciudad europea.