El 63 por ciento de las conexiones de banda ancha en hogares europeos en 2006 será a través de la tecnología ADSL, según un informe de Forrester, que recomienda a las operadoras de telecomunicaciones evitar grandes inversiones en el campo de la televisión.
La consultora considera que para finales de 2006 el 24 por ciento de los hogares europeos, es decir 38 millones de residencias, contarán con conexiones de banda ancha.
Forrester indica que para competir con la triple oferta de las compañías de cable (telefonía, Internet y televisión), las operadoras no deben crear redes híbridas de satélite y ADSL, lo que aumenta considerablemente los costes, sino centrarse en la eficiencia operativa, en aumentar la capacidad de sus redes y en llegar a acuerdos con las firmas de televisión vía satélite.
De esta forma, Forrester considera que las diversas tecnologías DSL, que permiten potenciar las capacidades de la red telefónica tradicional ofreciendo servicios de voz y datos, ganarán la partida al cable a la hora de ofrecer servicios de banda ancha al mercado residencial. Al mismo tiempo, la compañía cree que con los actuales precios y servicios para la banda ancha las operadoras no están obteniendo beneficios.
Por ello, consideran que la estrategia «más rentable» para los proveedores de ADSL es vender servicios de valor añadido para PCs como juegos, suscripciones musicales, contenidos para adultos, etc. Estos servicios ayudarán a los proveedores a acumular beneficios de los subscriptores dos años antes que si sólo ofrecieran acceso.
De esta forma, utilizando una tecnología madura y con una «limitada inversión adicional», las operadoras podrán obtener unos ingresos extra de 5,50 euros mensuales por cada subscriptor en seis años.