En el intento de lograr un confort en el hogar superior al que
ya de por sí éste puede ofrecernos, se hace referencia muchas
veces a los sistemas de automatización, control y la gestión de
las instalaciones y otros aspectos de la vivienda, las redes de comunicación
interiores y hacia el exterior,… Pero aparte de éstos -claros elementos
proveedores de valor añadido- conseguir una ambientación adecuada
en el entorno es, tal vez, algo más complejo. Dejando a un lado el diseño
y decoración de las estancias de la casa los sistemas de audio integrados
en el entorno tal vez se erijan como uno de los elementos de mayor influencia
a la hora de conseguir el ambiente idóneo.
Sistemas integrados en la vivienda
Actualmente lo más tradicional en el hogar consiste en
disponer de un equipo Hi-Fi con el que podemos escuchar música en una
habitación de la casa, y para llevarla al resto de las habitaciones de
la misma las opciones se reducen a adquirir y ubicar en ellas otros equipos,
o bien realizar una instalación de cables y altavoces que pueden resultar
algo caóticos y antiestéticos. Para eliminar esto algunas empresas
de electrónica de consumo han ideado, implementado y puesto en el mercado
sistemas de distribución de sonido en el hogar, con el objetivo de que
la distribución del audio en la vivienda sea una instalación más
que se deba tener en cuenta en el diseño de las mismas.
Esquema general
En líneas generales, los modernos sistemas comerciales
de sonido para consumo particular, se fundamentan sobre una base muy similar
a la seguida por un gran numero de las instalaciones domóticas. Así,
los dispositivos se encuentran compuestos por un sistema central que transmite
el sonido por toda la vivienda, concentrando en uno o varios puntos la operatividad
sobre la instalación. Los equipos suelen instalarse empotrados en la
pared, en un armario o en algún tipo de estructura hecha a medida para
el mismo, ubicado en lugares de la casa donde pueda resultar cómodo y
a la vez estético -en la medida de lo posible-. De resto los únicos
elementos que se encuentran a la vista son los altavoces, que igualmente pueden
instalarse empotrados en las paredes de las diferentes estancias de la vivienda
a las que se desee llevar el sonido. Para comodidad de los usuarios suele incluirse
algún tipo de control remoto del equipo, bien a través de infrarrojo
o de RF, con el que sea posible manipular los aspectos del mismo sin necesidad
de desplazarse. Estos sistemas se suelen llamar Multi-Room o también
Multi-Source / Multi-Zone.
Marcas y soluciones comerciales
Son muchas las marcas comerciales que han lanzado productos de
sonido ambiental. Russound, QnQ, Ineli, Bose, M&S Systems,… son algunas
de ellas. Aproximadamente todos siguen la misma filosofía y persiguen
los mismos objetivos, aunque los sistemas difieren entre sí en lo que
respecta a diseño, potencia y operatividad.
Por ejemplo, la empresa M&S ha lanzado una gama denominada
Music Communications Systems -sistemas de comunicación de música-,
fundamentado sobre la base esencial de este tipo de equipos. Aparece como alternativa
a los voluminosos sistemas de audio generalizados, tratando de minimizar al
máximo tanto el espacio que ocupa así como el tendido de cables
vistos. El panel de control central incluye, en su modelo MC960, un sintonizador
de radio AM/FM con 16 presintonías, control de volumen con pulsadores
digitales, manipulación de graves y agudos y además, incluye enchufes
de conexión para fuentes externas de sonido por si el usuario decide
conectar un reproductor de CD o cassette externo, tiene una potencia máxima
de 180 w y soporta hasta 60 altavoces distribuidos por la vivienda.