En 2006, la división de biometría de Rimax se cerró con una facturación de 180 mil euros y un importante crecimiento de la demanda de soluciones biométricas por parte del sector institucional y privado. No obstante, Rimax prevé este año el despegue definitivo del negocio de la biometría gracias a su aplicación a la vigilancia domestica. La previsión de Rimax es que este 2007 la división de biometría llegue a representar el 5% de su negocio, alcanzando una facturación de 800 mil euros.
Kim Sörensen, consejero delegado de Rimax, augura un importante despegue del negocio de la biometría: “actualmente sectores como la banca o los gobiernos ya empiezan a aplicar sistemas biométricos y a verlos factibles para resolver aspectos relacionados con la seguridad. Auguro que dentro de poco las soluciones biométricas en el campo empresarial y privada podrán ser una realidad cuotidiana”.
Rimax es una de las empresas que más esfuerzos han invertido en los últimos años en la implantación de los sistemas biométricos. La empresa dispone de una amplia gama de con sistemas de control de presencia y acceso bajo la marca Staff On Time. Su producto estrella es la Palm Scan, una innovadora tecnología de control de acceso basada en el reconocimiento de la palma de la mano, que funciona sin contacto a través de un escáner y se puede instalar en interiores, exteriores y detrás de escaparates.
Además de la división de biometría, Rimax dispone de otra categoría de productos profesionales con una amplia oferta de dispositivos de video vigilancia. No obstante, su división de negocio principal es la electrónica de consumo dirigida al usuario final, con una amplia oferta de productos de dispositivos de memoria, audio y video digital.