De regreso en Barcelona con motivo de la entrega de trofeos de la Barcelona World Race, el skipper del Delta Dore ha aprovechado su paso por la Ciudad Condal para visitar las instalaciones que su patrocinador tiene en Rubí, Barcelona.
Jérémie, feliz de estar de regreso en Barcelona tras tener que abandonar la regata al romper el palo en los mares del sur, compartió con todo el equipo de la filial española de Delta Dore un distendido encuentro durante el cual explicó su experiencia y la gran aventura que ha supuesto para este navegante participar en la Barcelona World Race.
“A pesar de su decepción, no me ha faltado su apoyo incondicional y me han hecho sentir su gran ilusión por ver de nnuevo el barco con sus colores en la línea de salida de la edición de 2010” explica Jérémie, quien ya ha empezado a trabajar en su próximo gran reto: la Vendée Globe 2008. “Es un proyecto inmenso, pesado, apasionante. Hay que dedicarle todo tu tiempo durante por lo menos tres años. En este momento el barco está en el astillero, donde le estamos haciendo las modificaciones necesarias para navegar en solitario, especialmente a nivel de los pilotos automáticos y en cubierta, optimizando aquellos aspectos que en la Barcelona World Race sentimos “al límite”.
Jérémie Beyou y su co-skipper Sidney Gavignet, asistieron a la entrega de premios de la Barcelona World Race, donde recibieron, junto al resto de equipos, el reconocimiento de los cerca de 2000 aficionados presentes en la ceremonia que ha clausurado la primera edición de esta vuelta al mundo a dos y sin escalas.