Tras poder contactar con más de 1.000 profesionales, FERMAX tiene muy claro que en España existe un alto nivel de cualificación y que hay aún un importante mercado por explotar en todas las ciudades.
En este contexto, la oferta de Fermax resulta especialmente atractiva por la variedad de respuestas, soluciones universales y propuestas a medida, que van desde los sistemas de control de accesos biométricos (con un destacadísimo lector térmico de huella único en el mercado español a un precio más que atractivo) hasta un nuevo mini-distribuidor de vídeo pensado para instalaciones de reposición. Todo ello sin olvidar equipos que permiten la conexión remota del videoportero a través de Internet, permitiendo la gestión y mantenimiento remoto de los edificios.
Pero sin duda el protagonismo de este catálogo es la placa Cityline. Se presentó en 2009 convirtiéndose rápidamente en un éxito su diseño y calidad, y por la facilidad que ofrece en la reposición: sus dimensiones en el modelo de audio + vídeo son idénticas a las que tenía la antigua placa de audio, lo que equivale a un paso de portero a videoportero sin tocar la fachada. El cambio se hace evidente gracias a la tecnología VDS que permite, además, aprovechar el cableado antiguo existente. Ahora en 2010, tenemos la oportunidad de conocer la gama completa de este producto estrella, que se presenta con importantes novedades.
La primera de ellas es que esta nueva placa Cityline incorpora cámara color de serie. Una clara apuesta por hacer avanzar el mercado del videoportero hacia estándares habituales en el resto de la vida cotidiana. También se presenta, ocupando la portada, el nuevo modelo digital ya disponible para su venta. La última novedad es la incorporación de la serie modular de este modelo, que permite diseñar cualquier placa de calle, con muy pocas referencias, ofreciendo un servicio inmediato a las comunidades.