Madrid será una de las primeras comunidades en las que se pondrá en marcha el dispositivo FN Prepago en viviendas públicas de alquiler. La gran demanda social que esta modalidad está demandando y la preocupación por parte de la Instituciones de aplicar la eficiencia energética en la vivienda social ha motivado su lanzamiento y la apertura de una delegación de la firma en Madrid capital. Concretamente en la calle Lisboa, número 3.
El nuevo sistema regula el control del gasto energético de un hogar mediante la técnica del prepago. El funcionamiento es similar al de los móviles. A través de una tarjeta el usuario carga el importe que desea y mediante un terminal, en el que se inserta dicha tarjeta, el dispositivo va descontando el gasto del consumo de energía con la que permite hacer funcionar la calefacción y el agua caliente sanitaria del hogar. El proyecto ha requerido de una inversión de cerca de 1,8 millones de euros.
FN Prepago está cerrando acuerdos con las entidades públicas de vivienda social de toda España pero una atención adecuada así como el gran número de viviendas que gestionan las AVS de Madrid y la zona centro del país son razones suficientes que han llevado a la marca a abrir una delegación en esta comunidad.
Un terminal inteligente
La idea de controlar el gasto energético a través del sistema prepago surge tras la necesidad de mentalizar a los usuarios de la necesidad tan importante de ahorrar energía y de evitar las “facturas sorpresa” en las que se dispara el importe por no haber vigilado el consumo. “El concepto lo teníamos claro desde el principio”, comenta Javier Acebrón, gerente de FN Prepago, “lo difícil era trasladarlo al plano real”. Dicho y hecho, se pusieron manos a la obra y tras casi dos años de trabajo e investigación el proyecto ya tiene forma: FN Prepago. “Se ha diseñado un terminal con tecnología de última generación capaz de controlar todo el gasto energético pero a la vez de estar también preparado para el futuro inmediato que nos viene” añade Javier.
El terminal, cuyo tamaño es algo más grande que una cajetilla de cigarrillos, aloja una tarjeta en la que el usuario ha cargado un importe cualquiera. Al introducirla en el aparato, este permite utilizar la calefacción y el agua caliente del hogar hasta que dicho importe se consuma. El usuario puede visualizar, a través de un display y en todo momento, el saldo disponible, la cantidad de energía consumida, alarmas programadas por exceso de consumo así como otro tipo de información disponible.
Javier Acebrón va más allá y comenta que “pronto, con el mismo aparato, se podrá controlar todo: teléfono, internet, hacer pedidos, compras, etc”. Una vez que el saldo se acaba la centralita le avisa que ya debe hacer la recarga optando por hacerlo a través de cajero automático, por internet o en el propio terminal.
Destino principal: la vivienda pública de alquiler
Por las características del proyecto se ha decidido empezar a comercializar el sistema en las viviendas públicas, preferentemente en las de alquiler. “Es donde el gasto energético ha de controlarse más. Las entidades de vivienda pública están encontrando una solución en el problema de morosidad en la viviendas de alquiler así como en la concienciación del uso de la energía”, comenta Acebrón.
Ya se está comercializando la primera generación de terminales y se están cerrando acuerdos para instalar FN Prepago en vivienda pública de varias comunidades españolas. En total serán cerca de 1.000 las viviendas que contarán con este sistema antes de fin de año pudiendo disfrutar de calefacción y agua caliente sanitaria con total control y conocimiento del ahorro conseguido.