Las soluciones profesionales de devolo dan salida a todos estos supuestos, y llegan incluso más lejos, ya que no solo sirven para aprovechar el cableado existente, sino que también son ideales para montar redes de larga distancia con un gran ancho de banda. El cable de red convencional tiene un alcance de unos 100 metros y la alternativa que supone la fibra óptica es muy cara. En cambio, gracias a las soluciones de devolo, podemos aprovechar, por ejemplo, el cable de antena de TV o coaxial de cualquier edificio u oficina para montar una potente red que satisfaga cualquier necesidad: puede conseguirse un alcance de 600 metros.
La tecnología dLAN de devolo aprovecha la infraestructura de cableado existente (cables eléctricos, coaxiales o de televisión, una línea de teléfono o cualquier cable de 2 hilos de cobre) para llevar Internet a todos los rincones. Las nuevas soluciones devolo dLAN Business son una alternativa asequible que permiten sacar el máximo rendimiento al cableado de un edificio para establecer una red informática de banda ancha.
Sus ventajas son claras: no es necesario realizar ningún tipo de obra o reforma, su instalación resulta de lo más sencilla y rápida, no entorpece ni paraliza la actividad de ningún negocio, aporta una seguridad total, ofrece un rendimiento mayor y ahorra más de un 50% en gastos de instalación si lo comparamos con un cableado convencional de red o con una red inalámbrica.