La sede madrileña del Museo Nacional de Ciencia y Tecnología está ubicada en la antigua estación de Delicias. Inaugurada por el rey don Alfonso XII en marzo de 1880, es en la actualidad uno de los mejores ejemplos de arquitectura del hierro en España.
Desde 1984 abre sus puertas como Museo del Ferrocarril, institución con la que el MUNCYT comparte edifico desde que se creara por Real Decreto en 1980 y abriera sus salas al público con la exposición “Abriendo las puertas de la ciencia” en Octubre de 1997.
Dentro del plan de ahorro energético en los edificios de la Administración Pública del Estado, el MUNCYT ha llevado a cabo una leve reforma en los 4 edificios que lo componen, para integrar un sistema de control inmótico para la climatización y la iluminación de todo el edificio, con el objetivo de ahorrar un 20% de gasto energético, aprovechando al máximo las instalaciones ya existentes.
Para ello, se ha instalado un sistema de control Teletask para inmótica: fiable, con 5 años de garantía, fácil de implantar y de fácil manejo tanto para el instalador, como para los responsables de mantenimiento del museo.
El proyecto de sistema de control para el MUNCYT incluye el control inteligente de 31 circuitos de iluminación y 13 zonas de climatización en el edificio principal del Museo, 9 circuitos de iluminación y 2 zonas de climatización en el edificio de oficinas, y el control total de la iluminación en los edificios de almacén y archivo. El museo también dispone de sensores de presencia en las exposiciones de la planta baja, integrados en el sistema, para apagar la luz cuando no hay visitantes.
Se ha dotado a todo el sistema de un punto central de control con el software GUI+, donde se centraliza la información de temperaturas de las diferentes zonas, estados de luces y clima, y control de la iluminación de todo el complejo.
Adicionalmente, se han automatizado las salas de conferencias de la planta alta y baja, para integrar el control de luces, climatización, pantalla motorizada y multimedia, de manera a simplificar su control.
Gracias a las programaciones horarias, automatizaciones, y regulaciones de iluminación y climatización, el MUNCYT espera obtener un considerable ahorro energético en la factura de la luz, respetando así el medio ambiente y elevando a su vez el confort de los usuarios. Con una inversión mínima se prevé conseguir un ahorro medio anual entorno al 20%, logrando amortizar la inversión en menos de 2 años y medio.