Esta nueva generación de Totems están dotados de gran versatilidad para superar cualquier reto, admitiendo monitores ELO o Hyundai de 40 a 47 y de 52 a 55 pulgadas, con o sin pantalla táctil.
Estos nuevos totems, pertenecientes a la serie TK-700, cuentan con un sistema de refrigeración forzada mediante ventiladores con filtro antipolvo. Además, su estructura está soldada a una base de acero de 10 mm de espesor para garantizar estabilidad y rigidez en todo el conjunto.
La parte frontal, para los que no llevan pantalla táctil, está hecha de policarbonato de 8 mm de grosor guiado en perfil de aluminio con el objetivo de proporcionar el mayor grado de protección en caso de vandalismo.
Mientras, la parte posterior cuenta con una puerta totalmente abatible y dos cerraduras de seguridad que permiten acceder al interior y facilitan la instalación de monitores y ordenadores.
El interior también dispone de una base con tres tomas de corriente, agujeros para cables y dos orificcios para poder fijar, si se requiere, el propio Totem al suelo. También cabe la posibilidad de incorporarle ruedas.
El TK-740 tiene unas dimensiones de 2.000 x 888 x 180 milímetros y pesa 47 kilos (sin el monitor), mientras que las dimensiones del TK-750 son de 2.000 x 960 x 180 milímetros, con un peso de 53 kilos (sin contar el monitor). La base de ambos modelos es de 10 x 960 x 400 milímetros.