Philips ofrece un nuevo sistema para el control de luminarias de un edificio, OccuSwitch Wireless, que consta de un sensor alimentado mediante batería montado en el techo y de un actuador independiente que se puede instalar hasta una distancia de 10 metros.
Está orientado a aplicaciones interiores donde no hay falso techo y el cableado no es de fácil acceso o para instalaciones antiguas que se quieren modernizar. El dispositivo es de fácil y rápida instalación, controla espacios de hasta 25 metros cuadrados instalado a una altura de 2,5 a 3,5 metros.
Sin embargo, gracias a su flexibilidad, es posible cubrir un área de hasta 160 metros cuadrados agrupando un máximo de diez sensores o actuadores en la misma red inalámbrica, lo cual facilita la creación de múltiples configuraciones en función de las necesidades del cliente.
El OccuSwitch Wireless incorpora un temporizador que permite retrasar el apagado de las luces hasta treinta minutos si la zona está vacía. Su propia inteligencia amplía automáticamente este retardo si los ocupantes realizan menos movimientos de los usuales. El patrón de detección de un OccuSwitch es de 3,6 por 5,4 metros para pequeños movimientos y de 5,4 por 7,2 metros para movimientos más amplios.
Además, incorpora una pestaña retráctil que permite limitar el área de detección evitando activaciones innecesarias, por ejemplo, en pasillos cercanos al área de funcionamiento. Para simplificar y agilizar la instalación lo máximo posible, OccuSwitch incorpora conectores Wieland aunque también puede conectarse con cableado convencional.