Telefónica, el Consorcio Sanitario Garraf a través de la Fundación Abat y la Universidad Politécnica de Cataluña Barcelona Tech (UPC) han puesto en marcha el proyecto Help, que tiene como objetivo mejorar la calidad de vida de aquellas personas que padecen la enfermedad del Parkinson a través un sistema de monitorización y medicación a distancia en tiempo real.
Presentado el pasado jueves 11 de abril, coincidiendo con el día Internacional del Parkinson, este sistema está formado por un pequeño sensor portátil, que capta los movimientos del paciente, y por una bomba subcutánea, que administra medicación para el control de la enfermedad.
El sensor detecta el empeoramiento del paciente e informa al sistema que, a su vez, vía móvil, da instrucciones a la bomba de fármaco para que aumente la dosis y trate los síntomas. Cuando el paciente mejora, la dosis de medicamento que administra la bomba vuelve a la normalidad.
De esta forma, el paciente siempre recibe la dosis necesaria en tiempo real para tratar los síntomas relacionados con la enfermedad. Toda la información del sensor y las reacciones del paciente ante la medicación se envían a un centro de asistencia, que también forma parte del sistema. Desde este centro de asistencia, los médicos especialistas pueden controlar los dispositivos a través de Internet y observar la evolución de los pacientes que los usan, así como interactuar con el paciente e intervenir en los casos en que sea necesario.
La primera fase del proyecto ya se ha finalizado con un piloto sobre siete pacientes, seis de ellos en España. Las experiencias piloto en España se iniciaron en noviembre de 2012 y finalizaron en marzo de 2013. En cuatro de los seis pacientes se apreciaron beneficios considerables. Dos de ellos, obligados a utilizar inyecciones de "rescate", vieron cómo se redujo el número de éstas y los otros dos incrementaron considerablemente el tiempo sin síntomas.
Actualmente no existe ningún tratamiento para estos pacientes que resuelva los síntomas justo cuando se producen. Habitualmente, a los pacientes se les prescribe una pauta fija de medicación. Ésta resulta insuficiente para controlar los síntomas en determinados momentos y, por el contrario, resulta excesiva en otros, de manera que los pacientes pueden experimentar efectos adversos.