Estos videoporteros automáticos combinan estética, calidad de materiales y altas prestaciones. En cuanto a prestaciones, destacan la posibilidad de almacenar un histórico de llamadas e imágenes realizadas en el momento de la llamada, comunicarse entre varios usuarios del inmueble, desviar las llamadas en caso de ausencia, desactivar el videoportero o incluso poner música en espera además de enviar y recibir mensajes de texto.
En este tipo de sistemas prima también el diseño de sus dispositivos pudiendo en muchos casos personalizarse con una gran variedad de colores, materiales, serigrafías y tamaños.
Ingeniería Domótica acaba de realizar ya una instalación de este tipo en el centro de Pamplona en un edificio de oficinas de siete plantas.