Philips ha anunciado la ampliación de su gama de detectores de movimiento inalámbricos OccuSwitch Wireless, una solución que controla el encendido y apagado automático de la iluminación en función de la ocupación de personas en la sala.
Este sistema consta de un sensor inalámbrico de alta sensibilidad alimentado mediante batería (cuya duración estimada es superior a ocho años), que se comunica mediante el protocolo de radio frecuencia ZigBee con un actuador instalado en el cableado de la red a una distancia de hasta 15 m.
La extensión de la gama añade al sensor de techo (modelo LRM1763) tres nuevos sensores de montaje adosado para aplicaciones de pasillos, paredes y esquinas. El detector diseñado para pasillos (LRM 1765) tiene un haz de detección estrecho que llega hasta los 45 m de largo, mientras que los sensores diseñados para zonas amplias (LRM1770 y LRM1775) tienen un área de detección de 15×15 m.
Ambas soluciones (pasillos y zonas amplias) son de alta eficiencia y rentabilidad, pues equivalen a la utilización de, al menos, ocho sensores de techo convencionales. Además, la flexibilidad de este sistema permite conectar hasta 10 sensores o actuadores para operar conjuntamente y cubrir áreas mayores dentro de una misma red.
Estos dispositivos, compatibles con casi todo tipo de lámparas y luminarias, incorporan un temporizador que permite retrasar el apagado de las luces hasta 30 minutos cuando la zona está desocupada. Su propia inteligencia amplía automáticamente este retardo si el sensor detecta movimiento inmediatamente tras el apagado.
Por otro lado, con el fin de simplificar y agilizar la instalación al máximo, los detectores de presencia OccuSwitch incorporan conectores Wieland, aunque también puede conectarse con cableado convencional incluso en combinación con interruptores existentes.
Para aplicaciones interiores donde no hay falso techo o el cableado no es de fácil acceso, o bien para instalaciones antiguas que se quieren modernizar, la opción wireless del OccuSwitch permite añadir control de iluminación a un edificio de forma sencilla y eficaz, consiguiendo más de un 30% de ahorro en los costes de alumbrado.