Los edificios con sistema de calefacción centralizada, que suelen ser los más antiguos, presentan una serie de problemas como que el reparto de calor no es uniforme en todas las viviendas, importantes desequilibrios térmicos en función de la situación de cada vivienda debido a un mal reparto de caudales, falta de confort en las viviendas, bien por exceso o por falta de calor, las válvulas de radiador son anticuadas y la mayor parte de ellas no ofrecen ninguna capacidad de regulación produciéndose un alto consumo energético y un desigual sistema de reparto de costes de calefacción por coeficientes de propiedad.
Con los repartidores de costes de Honeywell, es posible que los edificios sean eficientes con ahorros de hasta el 35%, conseguir un mayor confort térmico para los usuarios, un reparto equitativo de los costes de uso y mantenimiento de la instalación y de la calefacción pasen a un control individual. En definitiva, el usuario sigue disfrutando de los beneficios de un sistema centralizado de calefacción pero con las ventajas de un sistema individual.
Estos repartidores de costes de calefacción de Honeywell consisten en unos dispositivos que se instalan en cada radiador de la vivienda, siguiendo unas estrictas normas de montaje, todo ello recogido en la norma UNE EN 834. Incorporan la última tecnología RF y permiten, mediante dos sensores y el software adecuado, calcular la emisión calorífica del radiador en cada momento. Además, vienen dotados de sistema antimanipulación para evitar fraude por parte del usuario. La información de la emisión de cada radiador se transmite por radiofrecuencia, de manera mensual o anual, a un sistema de recogida de datos Walk-by.
Este sistema consta de un receptor y un ordenador portátil o PDA que permite a la empresa encargada de gestionar las mediciones recoger los valores de todos los repartidores. El software indica cuántos repartidores se han leído y cuántos restan para terminar con ese edificio. Los datos recogidos por el sistema se pueden exportar de manera sencilla a una hoja de cálculo para su posterior incorporación al sistema de facturación. El control de la sala de calderas se actualiza con un sistema gestión remota. Este tipo de sistemas permite a la empresa de mantenimiento conocer en todo momento lo que ocurre con la instalación.
En caso de averías, la empresa de mantenimiento recibe los mensajes de aviso del sistema y permiten evaluar la necesidad o no de enviar personal de mantenimiento a la instalación. Estudios realizados en Italia demuestran que la instalación de repartidores de costes de calefacción modifica la actitud del usuario y permiten, solo por este hecho, un ahorro medio de un 15%.