La Asociación Española de Fabricantes de Iluminación (ANFALUM) y la Comunidad de Madrid han firmado el pasado martes 30 de julio la puesta en marcha de la I edición del Plan Renove de Instalaciones de Alumbrado de Emergencia, que tiene como objetivo mejorar la seguridad en edificios y locales de concurrencia pública, así como promover la sustitución de los equipos convencionales por aquellos que incorporan el sistema auto-test. Este Plan entrará en vigor a partir del 1 de septiembre.
El acto de la firma del Plan Renove contó con la presencia del Presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, de la Presidenta de ANFALUM, Pilar Vázquez, y del Presidente de la Fundación ECOLUM, Aurelio González Soriano.
Durante su intervención, González subrayó que "los propios fabricantes son los que, a través de incentivos, van a hacer que los instaladores puedan renovar esos equipos, para mejorar la seguridad de las instalaciones de este tipo de alumbrado".
Concretamente, los fabricantes aportarán 8 euros por luminaria vendida y será el principal ente que contribuya económicamente, junto con ECOLUM y AMBILAMP, a la implementación de este Plan Renove, con el objetivo de reforzar su política de fomento de la seguridad en los locales de tránsito público.
Los aparatos de emergencia con sistema auto-test permiten conocer de manera sencilla, a través de la señal luminosa que incorporan, el correcto funcionamiento de la lámpara y de su autonomía, posibilitando que, de manera inmediata, puedan ser sustituidos por una empresa instaladora.
Estas actuaciones persiguen fomentar la renovación de los aparatos existentes, ya obsoletos y con escasas garantías de correcto funcionamiento en locales de concurrencia pública.
El alumbrado de emergencia en los locales de concurrencia pública desempeña un papel clave en la seguridad al permitir la iluminación de las señales y de las vías de evacuación, así como la localización de los equipos de alarma y protección contra incendios.
En este sentido, resulta importante que el alumbrado de emergencia funcione cuando se produce un fallo de la alimentación normal y que proporcione el nivel de iluminación previsto con, al menos, una hora de autonomía.
Según estimaciones, en la Comunidad de Madrid hay entre tres y cuatro millones de equipos de alumbrado de emergencia instalados, cuya duración y fiabilidad se ve reducida por factores técnicos relativos a su utilización, como el número de veces que han entrado en funcionamiento, los ciclos de recarga o la duración de recarga.