Schneider Electric ha presentado la subestación eléctrica de envolvente metálica E-house, para plantas o instalaciones industriales de los sectores de la minería y gas y petróleo. Se utiliza para modificar y establecer los niveles de tensión de una infraestructura eléctrica, facilitando el transporte y distribución de la electricidad.
Entre los componentes básicos se encuentran las cabinas de MT y transformadores, baterías de condensadores, cuadros de BT, HVAC, sistemas de alimentación ininterrumpida (SAI), así como sistemas de iluminación, detección y extinción de incendios y control de accesos.
Los equipos y sistemas de la subestación están diseñados, integrados y montados en la fábrica, con lo que aumenta la fiabilidad de la subestación y se minimizan los trabajos en el lugar de las obras. El mantenimiento del E-house es sencillo y la vida útil del diseño de la envolvente de los mismos es de 30 años.
Dada la criticidad del suministro eléctrico para el proceso industrial, las subestaciones eléctricas son elementos clave para la ingeniería y la gestión del proyecto. Entre las principales ventajas de E-house destacan la reducción de costes y de las situaciones imprevistas que pueden presentarse in situ, la seguridad y la fiabilidad, tanto para las personas como para los bienes, y su capacidad para resistir condiciones ambientales adversas.
Además, la subestación eléctrica E-house cumple las normativas internacionales y locales y está diseñada y fabricada exclusivamente por Schneider Electric, con lo cual, el cliente solo tendrá que tratar con un solo proveedor para el conjunto del suministro.
La fabricación de la mayor parte de equipos la realiza Schneider Electric y el ensamblaje se hace íntegramente en su fábrica, reduciendo los costes de ingeniería y gestión de la cadena de suministro. E-house es una solución personalizada y su entrega al cliente final se realiza llave en mano.