Fermax acaba de lanzar en el mercado su nuevo monitor de videoportero: SMILE. Se trata de un terminal manos libres con nuevas funcionalidades, de un sistema de gestión avanzada para la vivienda, de altas prestaciones y uso intuitivo, que toma como propio el lenguaje de las últimas tecnologías.
Su interior se presenta de la forma más sencilla posible ante el usuario. Morfológicamente, el monitor es un terminal liso, blanco y plano dotado de una pantalla TFT a color y un teclado que incluye un teclado adicional que resulta invisible hasta que el usuario lo necesita. Gracias también a su extrema delgadez y a sus esquinas redondeadas, el conjunto transmite una impresión inmediata de frescura y elegancia.
Este diseño se ha prolongado más allá de la superficie yendo en busca de la mejor usabilidad. El resultado es una interfaz de usuario que ofrece un uso intuitivo y simple. Tanto, que el usuario puede programar con facilidad y sin instrucciones previas cualquiera de las muchas funciones del equipo.
SMILE se presenta en dos formatos diferentes: con pantalla de 7” o con pantalla de 3,5” y ambos pueden ser instalados en superficie o empotrados. En el primer caso, el monitor sobresale 20 mm de la pared; si se elige empotrar el equipo (en ese caso se sirve un marco para ofrecer un acabado perfecto) el perfil visible es de tan solo 4 mm.
SMILE ofrece funciones avanzadas de serie: diferentes timbres, opción de no molestar, llamada de pánico y control de ascensor, entre otras. Y al igual que en todos los productos de Fermax, cuenta con diferentes elementos para facilitar la accesibilidad a todas las personas.
SMILE, que ha sido señalado por la prestigios asociación profesional ADI-FAD como uno de los productos mejor diseñados de 2013, es un proyecto de Ramón Benedito, Premio Nacional de Diseño en 1992 y actual Worldwide Design Partner de Fermax.