El equipo del Plan Románico Atlántico ha concluido los trabajos en la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción en Pobladura de Aliste y en el Santuario de la Virgen de la Bandera en Fermoselle, ambas en la provincia de Zamora. Igualmente, se ha concluido la intervención en la ermita del Castillo en Yecla de Yeltes (Salamanca). Los tres edificios han sido incluidos, además, en el Sistema de Monitorización del Patrimonio (MHS) para garantizar su conservación preventiva.
En el caso de la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción en Pobladura de Aliste, en Zamora, lo más destacado del trabajo ha sido la apertura del hueco de la portada románica ubicada en el muro norte, que permanecía tapiada. En la localidad zamorana de Fermoselle, la actuación realizada en la Iglesia o Santuario de la Virgen de la Bandera se ha centrado en la sustitución del sistema de iluminación para adecuarlo a la estética del edificio y para optimizar el consumo. Además, el nuevo sistema de megafonía se ha integrado con la nueva iluminación, creando una pieza que aúna luz y sonido.
El principal objetivo de la intervención realizada en la ermita del Castillo, cuyo origen se remonta a principios del siglo XIII, ha sido dotar al templo de energía eléctrica. La ermita cuenta ahora con un sistema de gestión sostenible de energía, muy alejado del antiguo generador de gasolina. Otro aspecto importante ha sido el rediseño de la iluminación, que permite realzar los elementos singulares del templo. También se han eliminado las ventanas tipo velux y se ha instalado un sistema de iluminación cenital para potenciar la entrada de luz natural.
Como uno de los objetivos prioritarios de los promotores del Plan de Intervención Románico Atlántico es garantizar la conservación preventiva de estos edificios históricos sobre los que se interviene, los tres templos han sido incluidos en el Sistema de Monitorización del Patrimonio (MHS), desarrollado por la Fundación Santa María la Real.
El Plan Románico Atlántico es un proyecto de colaboración transfronteriza para la conservación del patrimonio en el que intervienen Junta de Castilla y León, Fundación Iberdrola, Secretaría de Estado de Cultura de Portugal y Fundación Santa María la Real, además de las Diócesis de Zamora, Astorga, Salamanca y Ciudad Rodrigo.