El 61% de los ciudadanos considera que el hogar conectado será una realidad en los próximos cinco años, de acuerdo con el informe Internet de las Cosas: El Hogar Conectado elaborado por el fabricante de componentes y dispositivos para seguridad, Fortinet, donde ofrece una perspectiva global del Internet de las Cosas, los problemas de seguridad y privacidad que entran en juego, y cómo los ciudadanos hacen frente a estos nuevos retos en su hogar.
La investigación se ha realizado durante el mes de junio a una muestra de 1.801 aficionados a la tecnología sobre el Internet de las Cosas en referencia al hogar conectado.
El estudio también revela que los ciudadanos están dispuestos a pagar por un hogar conectado. Al ser consultados sobre si estaría dispuesto a pagar por un nuevo router inalámbrico para conectar sus aparatos domésticos
, el 40% respondió que por supuesto
, mientras que un 48% contestó que quizá
. En línea con esta pregunta, más de un 50% declaró que pagaría más a su proveedor de Internet para que le permitiera que sus aparatos estuvieran conectados.
Aunque algunas personas afirmaron que pagarían más porque sus hogares estuvieran conectados, cuando se pregunta sobre qué factores influyen a la hora de adquirir un aparato con conexión, en todos los países los encuestados coincidieron en señalar que el precio es un factor clave, seguido de características o funcionalidades y la marca del fabricante.
Preocupación por la seguridad
El 69% de los encuestados se mostró preocupado sobre que los aparatos de su casa con conexión a Internet pudieran sufrir una brecha de seguridad o su información sensible se viera afectada. Respecto a la cuestión sobre cómo se sentiría si un dispositivo de su hogar recopilara, sin que el usuario lo sepa, información y lo compartiera con otros, el 62% declaró que lo consideraría una violación a su intimidad y tomaría medidas
.
En relación a la pregunta sobre quién debería tener acceso a los datos recogidos por un electrodoméstico conectado, la mayoría (66%) afirmó que sólo ellos sí mismos o aquellos a los que el dueño otorgue el permiso. Sin embargo, los usuarios divergen sobre cómo asegurar los aparatos domésticos conectados. Para un 50% el router debe proporcionar esa protección, mientras que para el restante 50% ésta es responsabilidad del proveedor de Internet.