El Departamento de Desarrollo Económico del Gobierno de Navarra, competente en materia de energía, considera «muy recomendable» que en los bloques de pisos vecinales con instalaciones centralizadas se instalen contadores individuales de los consumos de calefacción y agua caliente sanitaria.
Esta medida, contemplada en una directiva europea, afecta a alrededor de 60.000 viviendas en Navarra, situadas en bloques edificados en las décadas de 1960, 1970 y principios de la de 1980. Como norma general, actualmente el pago por los servicios de calefacción y agua caliente está vinculado a la superficie de cada hogar.
El plazo establecido por la norma europea de ahorro para realizar este cambio vence el 31 de diciembre de 2016, pero en España todavía no se ha traspuesto la normativa, aunque sí existe un proyecto de Real Decreto.
La Dirección General de Industria, Energía e Innovación invita a las comunidades vecinales a adelantar la adaptación de sus instalaciones porque se ha comprobado que, con el cambio, existe una mayor conciencia del gasto en el hogar y se controla ese consumo para pagar menos. El ahorro para el conjunto de la comunidad se estima entre el 10 y el 20%. Esto supone un ahorro de entre 120 y 200 euros al año en un hogar medio que gaste 800 euros anuales en calefacción, según datos del Departamento.
Además de vincular el pago a la energía realmente consumida en cada hogar, el Departamento también recomienda instalar sistemas de regulación o control de la temperatura, de tal forma que cada vivienda pueda adaptar su demanda y su consumo a sus necesidades.
El Departamento recomienda a las comunidades vecinales interesadas en acometer estos cambios o en valorarlos que se pongan en contacto con las entidades que administran sus fincas o con las empresas instaladoras y mantenedoras de las instalaciones.