El equipo de trabajo de SHCity ha comenzado ya a implementar en Ávila una solución tecnológica de código abierto que permitirá mejorar la gestión, conservación y dinamización turística de conjuntos históricos en Europa. El alcalde de la ciudad, José Luis Rivas, y la coordinadora de la iniciativa, Begoña García, de la Fundación Santa María la Real del Patrimonio Histórico, han sido los encargados de presentar los avances de este proyecto de cooperación transnacional que comenzó su andadura en julio de 2016 y que implica a un equipo multidisciplinar de profesionales de España, Francia y Portugal.
La presentación se ha llevado a cabo en el Palacio Superunda o Caprotti, uno de los 29 espacios de la ciudad, donde ya ha comenzado a desplegarse una red de 226 sensores y dispositivos que controlarán en tiempo real cerca de 1.000 parámetros ambientales o estructurales, así como otros relacionados con la seguridad, el consumo energético o el flujo de visitantes.
Los datos recogidos por los sensores se sumarán a los derivados de fuentes de información ya existentes, para transformarlos en información útil que facilitará el trabajo de los gestores, mejorando el diagnóstico y la toma de decisiones, mediante un conocimiento más preciso de los edificios y su entorno. Está prevista, además, la instalación de dos paneles interactivos, para que personas invidentes puedan tener acceso a determinados datos de interés.
Edificios históricos para monitorizar
Los 29 espacios que se monitorizarán intra y extra muros se han seleccionado para abarcar todo el conjunto declarado Patrimonio Mundial. La instalación se ha iniciado ya en dos edificios: el Palacio Superunda y el de los Verdugo. En el primero de ellos se han colocado 15 de los 44 dispositivos que conforman la instalación y en el segundo 10 de 34, desde sensores ambientales a otros destinados a controlar la eficiencia energética, la seguridad o a garantizar la conservación preventiva tanto de los inmuebles como de los bienes que albergan, mediante la detección, por ejemplo, de posibles ataques de xilófagos (termitas, carcoma u hongos) a la madera.
En fases sucesivas se irá completando la instalación en éstos y otros edificios como la catedral del Salvador, las iglesias de San Pedro y San Segundo, el Real Monasterio de Santo Tomás o la Basílica de San Vicente, adaptando en cada caso, los dispositivos a las necesidades y requerimientos de cada sitio. La instalación correrá a cargo del equipo multidisciplinar de profesionales que desarrolla el proyecto pertenecientes a la Fundación Santa María la Real del Patrimonio Histórico, el Instituto Tecnológico AIDIMME, Centro Tecnológico CARTIF, Faculdade de Ciências e Tecnologia da Universidade Nova de Lisboa, NOBATEK, centro tecnológico TECNALIA