El hotel W Mexico City, desde su inauguración en 2003, ha sido un espacio de encuentro con personalidades destacadas de la moda, el diseño y las tendencias cosmopolitas culturales internacionales y del país azteca. El edificio, obra original del arquitecto mexicano Luis Bosoms, se ubica en un enclave privilegiado en Ciudad de México: la zona Polanco, frente al Auditorio Nacional y cercano al Bosque de Chapultepec. En 2014 comenzaron sus obras de renovación, en las que han participado un amplio y variado equipo de arquitectos e interioristas de reconocido prestigio internacional.
En su renovación, ha apostado por mejorar sus instalaciones tecnológicas y ha integrado un sistema domótico KNX del fabricante Jung así como sus mecanismos eléctricos.
Los resultados de esta renovación pueden verse en la remodelación del Living Room Bar, con un diseño atrevido, así como en sus 237 habitaciones, renovadas con una decoración vanguardista.
Como parte destacada de la obra, se ha apostado por mejorar las instalaciones tecnológicas del hotel, integrando un sistema domótico KNX del fabricante Jung así como sus mecanismos eléctricos.
El hotel ha optado por las soluciones de control KNX de Jung que permiten gestionar y monitorizar iluminación, climatización, ventilación, seguridad o creación de escenas para las habitaciones o zonas determinadas del edificio.
Estas soluciones pueden aplicarse en cualquier tipo de establecimiento hotelero, desde pequeñas casas rurales hasta edificios con centenares de habitaciones. Además, está demostrado que con los sistemas de control de presencia y con apoyo de la luz solar, los ahorros de energía pueden llegar al 60% en climatización e iluminación, uno de los principales objetivos del sector terciario, especialmente de los establecimientos hoteleros.
Iluminación y climatización, a un toque
En este caso, en el Hotel W Mexico City, Jung ha implementado el sistema de gestión domótica KNX para el control de la iluminación en los salones del hotel, la zona de banquetes y el nuevo restaurante J by José Andrés, que incorpora mecanismos con acabados en latón Dark. La iluminación, como el resto del sistema eléctrico del hotel, puede ser controlada localmente o en remoto, mediante iPad, en la totalidad del edificio.
Otra aportación de Jung al confort y comodidad de los clientes del W Mexico City es el sofisticado sistema de control de iluminación y climatización de las habitaciones, que permite reproducir escenas ambientales programadas mediante teclados F40 situados en la entrada de la estancia, los cabeceros de la cama y la zona de baño. Al mismo tiempo que garantizan una gran flexibilidad y el control eficiente de la instalación eléctrica, estos dispositivos proporcionan importantes ahorros de energía.
Es posible compactar una amplia variedad de funciones en un espacio tan reducido como el de un pulsador eléctrico F40: encendido, apagado y regulación de la iluminación, subida y bajada de persianas, o bien una combinación de estas operaciones. Su funcionamiento es tan sencillo e intuitivo que el huésped no tiene necesidad de aprender nada.
En el caso del W Mexico City, los teclados F40 de Jung controlan circuitos de iluminación y climatización de cada habitación. En el primer caso, el control es de tipo on/off de escenas programadas, pero incluye también elementos de iluminación RGB regulados. Además, para facilitar el entendimiento y usabilidad de los teclados, se ha serigrafiado la superficie de los pulsadores con indicaciones claras y precisas.
Por otro lado, el W Mexico City logra alta eficiencia energética en climatización gracias al uso de los termostatos KRM TS D de Jung. El sistema controla fan-coils a cuatro tubos, tanto para calefacción como para refrigeración. Cada termostato maneja el nivel de temperatura, aunque dispone también de un interruptor que activa un modo automático para conseguir el mayor confort y eficiencia en el consumo energético del hotel.
Los termostatos KRM TS D de Jung incorporan cuatro LEDs de estado de color rojo y otro más azul que, además de testigo de funcionamiento y del estado de programación, hace las veces de luz de orientación. Asimismo, integran también entre otras prestaciones un sensor de temperatura ambiente, regulación de temperatura con valor de consigna, indicación de la temperatura ambiente o la nominal, indicación de la temperatura exterior (con sensor externo mediante una estación meteorológica de Jung), indicación de la hora, etc.
Además, el teclado tiene funciones de accionamiento, regulación, control de persianas, envío de valores y llamada de escenas, entre otras posibilidades. También permite el funcionamiento por tecla o tecla basculante, vertical u horizontal, de manera que se puede aplicar al control de fan coil, con hasta ocho velocidades y modo automático.
Monitorización centralizada
El hotel W Mexico City pretende captar su clientela en el segmento más destacado de viajeros, tanto de turismo de ocio y cultura como corporativos, ya sean locales o extranjeros. Por esa razón, su diseño y su estilo vanguardistas hacen del W un lugar ideal para los viajeros más exigentes y sofisticados.
El establecimiento ofrece una gran variedad de habitaciones con nombres que hacen referencia a las sensaciones que pretenden suscitar: Wonderful, Fabulous, Fantastic, Marvelous, WOW, etc. La habitación más sencilla es una amplia estancia de entre 34 y 42 metros cuadrados, equipada con wifi de alta velocidad, televisión de 42 pulgadas, tomas eléctricas universales, conectores para alimentación de dispositivos electrónicos vía USB, baño con ducha efecto lluvia, edredón de plumas, etc.
Asimismo, se ha implementado un sistema de gestión de edificios que permite monitorizar centralizadamente cada rincón del hotel en función de parámetros previamente establecidos.
Para los mecanismos eléctricos se ha empleado la serie LS 990 de Jung, con acabado en aluminio, en la que se integran tanto los teclados multipulsador F40 como los termostatos KRM TS D. Desarrollada siguiendo la tradición de la Bauhaus, esta serie de mecanismos de Jung presenta una geometría constructiva cuadrada, con una superficie máxima de interacción con el usuario que garantiza un gran confort de manejo. Su sencillez visual basada en la firmeza de sus rectas, encaja de manera armoniosa en cualquier entorno.