La isla de Formentera gestionará la lectura de sus contadores de agua de manera telemática, con la instalación de casi 2.400 contadores inteligentes que facilitan la lectura en tiempo real, lo que mejora la eficiencia de la red y la información al cliente. El sistema permite la lectura remota y automática de los contadores de agua, enviando datos cada 8 segundos directamente al centro de control de Sant Francesc, donde se realiza la facturación por consumo a través de un programa informático de gestión.
Con una inversión total prevista de este proyecto presupuestada en 302.765 euros, el Consell, a través de Aqualia, irá ampliando de manera progresiva el sistema a toda la isla sin que suponga un coste directo sobre las tarifas de agua. Además, los clientes pasarán a recibir la facturación mensualmente, en vez de trimestralmente como hasta ahora.
Los 236 contadores inteligentes que se instalaron allí permiten un control monitorizado del consumo de agua de los contadores individuales de cada usuario y del agua aportada a la red de distribución de este núcleo urbano.
Conocer el consumo a través de la aplicación Smart Aqua
Los usuarios pueden conocer su consumo desglosado por horas desde la aplicación para móviles Smart Aqua, controlando así el consumo de su vivienda incluso si no residen en ella. Además, el sistema detecta si existe una fuga interior en la vivienda como indicativo de posibles averías en sus instalaciones, evitando así facturas elevadas por pérdidas de agua.
El telecontaje indica también cuando hay un comportamiento anómalo del aparato por parada del mismo y facilita al Servicio Municipal de Aguas información desglosada por horas del agua que no se registra en todo el núcleo de Sant Ferran a causa de pérdidas en la tubería de distribución por roturas, fraudes o consumos no controlados.
Durante el último año en Sant Ferran se han detectado 31 incidencias, con una pérdida mediana de 17l/h, lo que significaría 379.400 litros/mes, el equivalente a 38 camiones cisterna. La mayoría de estas 31 incidencias corresponden a fugas debidas a un mal funcionamiento de las instalaciones interiores de los usuarios.