Con el auge IoT, se está empezando a tener mayor conciencia sobre la seguridad de las empresas a la hora de la conexión en red de diferentes dispositivos, en ocasiones son de dudosa procedencia. Fortinet, la empresa en soluciones de ciberseguridad integradas y automatizadas, se ha hecho eco de esta preocupación y pretende mejorar los recursos para garantizar la seguridad de las empresas tanto en las conexiones inalámbricas como de la red cableada.
La compañía ha desarrollado un nuevo controlador de acceso a la red, FortiNAC, que reduce los riesgos de seguridad con aquellos dispositivos no seguros. Este controlador genera controles dinámicos para garantizar que todos los dispositivos estén autentificados o autorizados y estén sujetos a una política contextual que define quién, qué, cuándo y dónde se permite la conectividad. Los usuarios de la red sólo tendrán acceso a determinadas aplicaciones, infraestructuras y activos que marque los protocolos de las compañías. No existen limite de dispositivos conectados y elimina la implementación en cada ubicación de una instalación de múltiples sedes.
John Maddison, SVP de productos y solutiones en Fortinet asegura “la transformación digital trae consigo la proliferación de dispositivos IoT no seguros con acceso a la red y, consecuentemente, incrementa el riesgo de que se produzcan brechas de seguridad”.
Mayor control del acceso a la Red
Este controlador ayuda a cumplir las políticas de parcheo de los dispositivos y las versiones de firmware de las compañías, de tal manera que los dispositivos que incumplan los perfiles marcados quedarán automáticamente en cuarentena de manera inmediata. En cuanto a los dispositivos desconocidos se les vetará el acceso a la infraestructura corporativa.
Fortinet, a su vez, ha fortalecido su Security Fabric permitiendo conectar dispositivos de red más allá del programa de partners Fabric-Ready a un entorno más amplio de proveedores múltiples, e incluye cortafuegos, switches, puntos de acceso inalámbricos y endpoints de terceros.