La gama de canalizaciones eléctricas prefabricadas para la distribución de energía en los data centers de Legrand se amplía con Busbar, una solución para distribuir la electricidad con mayor facilidad y flexibilidad, al tiempo que reduce los costes de instalación y optimiza el tiempo a los profesionales.
La gama de Busbars de Zucchini, marca de Grupo Legrand, está disponible en media potencia, llegando a los 6.300 A, con una corriente nominal garantizada para una temperatura ambiente de hasta 55ºC. Para potencias medias, la gama cuenta con Track Busway de Starline, marca de Grupo Legrand, apta para sistemas de 100 y 225 A, para suministrar una gran cantidad de energía a entornos de misión crítica que así lo requieran. Este sistema incluye elementos lineales, codos y tes que se ensamblan para crear un sistema de distribución de energía plug and play.
Entre las ventajas que ofrecen las Busbars de Legrand, destaca la reducción de los costes y tiempos de instalación, ya que las canalizaciones no requieren de mucha mano de obra en la construcción, reduciendo el coste de la instalación y permiten unas reformas más asequibles, en caso de que hubiese.
Gracias a su diseño flexible, la gama Busbar permite añadir, eliminar o reubicar la energía de forma fácil y rápida, sin tiempo de inactividad. A esta flexibilidad se une el hecho de que algunas unidades enchufables puedan desconectarse y volverse a conectar sin necesidad de cortar el suministro eléctrico.
Canalizaciones eléctricas prefabricadas sostenibles
Las Busbars cumplen con otra de las máximas que comparten todas las soluciones y familias de la firma, la sostenibilidad. Por un lado, porque requieren menos materiales de instalación y, por otro, sus tomas de corriente son reutilizables y reubicables.
Al final de su vida útil, las canalizaciones eléctricas prefabricadas son ecológicas, gracias a su fácil desmontaje que permite separar las diversas materias primas para su reciclaje.
Asimismo, las canalizaciones proporcionan ventajas adicionales como su diseño compacto que permite realizar esquinas pronunciadas, optimizando el espacio en el interior de los edificios, mientras que su envolvente metálica ofrece un blindaje contra las emisiones electromagnéticas, creando un entorno más saludable tanto para las personas como para los productos electrónicos.