El Ayuntamiento de Olesa de Montserrat (Barcelona) y la Fundación Mutua de Propietarios han firmado un acuerdo de colaboración para impulsar el proyecto ‘Por una Olesa más accesible’. El objetivo del proyecto es desarrollar un mapa de accesibilidad de la localidad, que ayudará a identificar las barreras arquitectónicas de los edificios de viviendas con el objeto de solventar dichas carencias.
Para la elaboración del mapa, los vecinos de Olesa de Montserrat tienen a su disposición la aplicación Zero barreras de la Fundación Mutua de Propietarios. A través de la aplicación, se puede valorar los elementos comunes del edificio y detectar cuáles son las barreras que dificultan a una persona con movilidad reducida acceder a la finca.
Con los datos obtenidos, el ayuntamiento y la fundación establecerán un índice de accesibilidad de los edificios de viviendas de la localidad, que será la base de una propuesta de alternativas técnicas de carácter general para resolver las principales deficiencias detectadas en materia de accesibilidad.
Según el Ayuntamiento de Olesa de Montserrat, el segundo paso de esta iniciativa es el de estudiar las acciones que se pueden tomar para eliminar las barreras arquitectónicas, además de impulsar iniciativas a través de ayudas económicas para la mejora estructural y de accesibilidad de los edificios. En 2021, el consistorio ha destinado 100.000 euros a estas ayudas.
La iniciativa ‘Olesa Accesible’ se presentará de forma oficial el próximo 20 de noviembre en el Teatro de La Pasión de Olesa con un concierto solidario de la Joven Orquesta Sinfónica de Barcelona para impulsar y apoyar esta iniciativa. Los beneficios que se generen de la venta de entradas servirán para financiar parte de esta iniciativa, que buscará soluciones para hacer de Olesa un municipio más accesible.
Estudio de accesibilidad de la Fundación Mutua de Propietarios
De acuerdo con el estudio ‘La accesibilidad en las viviendas de España’ elaborado por la Fundación Mutua de Propietarios, sólo un 0,6% de los edificios de viviendas son universalmente accesibles, provocando que alrededor de 100.000 personas no puedan salir nunca de su casa y que 1,8 millones sólo lo puedan realizar con la ayuda de terceros. En concreto, un 63% de las viviendas no son accesibles de la calle al portal al contar con escaleras en este punto, sólo un 28% tienen rampa y un 22% carece de ascensor.
La legislación vigente establece que las zonas comunes de los edificios plurifamiliares donde residan personas con discapacidad o mayores de 70 años deben ofrecer las condiciones de accesibilidad adecuadas a las necesidades de acceso a la vivienda, de comunicación y de interacción que sean técnicamente posibles, correspondiendo a la propia comunidad de propietarios llevar a cabo y sufragar las actuaciones y las obras de adecuación necesarias.