El Gobierno de la Región de Murcia ha publicado el pasado mes de diciembre una línea de ayudas para mejorar la accesibilidad en edificios y viviendas a través de la instalación de domótica, videoporteros visuales y auditivos, salvaescaleras, grúas eléctricas, e incluso, ampliación de espacios y la adecuación de baños y cocinas en viviendas habituales.
El objetivo de estas ayudas es mejorar la accesibilidad en el mayor número de edificios y viviendas, principalmente en aquellos hogares donde residen mayores de 65 años y personas con discapacidad.
Enmarcada en la estrategia ‘Haciendo Hogar’ del Gobierno murciano, la ayuda será compatible con otras solicitadas para el mismo objeto, siempre y cuando el importe de todas ellas no supere el coste total de las actuaciones.
Requisitos de las ayudas
Esta línea de ayudas, a la que se ha destinado un total de 7,2 millones de euros hasta 2024, tiene un límite del 60% del coste de la obra o del 80% cuando en la vivienda resida, al menos, una persona con discapacidad o mayor de 65 años. De esta forma, las actuaciones tendrán una financiación máxima de hasta 12.500 euros para las casas unifamiliares o de 6.000 para aquellas ubicadas en edificios residenciales. En el caso de que el solicitante posea un grado de discapacidad igual o superior al 33%, la cuantía se verá ampliada hasta 18.000 euros.
Los beneficiarios de esta línea de ayudas pueden ser las comunidades de vecinos o los propietarios de viviendas unifamiliares o residenciales, cuyas viviendas estén finalizadas antes de 2006 y sea el domicilio habitual y permanente de las personas solicitantes. Además, deberá disponer de un informe técnico con fecha previa a la solicitud que acredite la procedencia de la actuación.
Las ayudas podrán ser solicitadas tanto por el propietario como por el arrendatario de la vivienda. En este último caso, siempre y cuando el solicitante cuente con el acuerdo formal del titular de la casa.
La subvención deberá destinarse al pago de las obras y a los costes propios de honorarios, certificados y gastos propios de la tramitación administrativa y tributos. Se considerarán subvencionables las actuaciones no finalizadas antes del 1 de enero de 2022.