El proyecto de investigación Smart Building Living Lab (SmartLab) tiene el objetivo de mejorar los edificios existentes en la ciudad de Limerick (Irlanda) para reducir su consumo energético. Para ello, los investigadores convertirán estos edificios en inteligentes, utilizando un kit de herramientas de bricolaje y componentes listos para usar. Además, el proyecto identificará las infraestructuras a escala de la ciudad donde podrían implementarse para reducir los costos a los propietarios y fomentará la adopción del indicador de preparación inteligente (SRI) y los servicios inteligentes asociados (energéticos y no energéticos).
El proyecto SmartLab, liderado por la Universidad de Limerick, instalará sensores inalámbricos en entre 50 y 100 edificios ubicados en la zona de descarbonización de Limerick, para monitorizar y reducir el uso de energía en los edificios.
Con los datos aportados por los sensores, los investigadores examinarán las barreras financieras y técnicas para el despliegue de tecnologías inteligentes, y las oportunidades que podrían surgir de la adopción de marcos como el SRI de la UE, que permitiría la adopción de tecnologías y servicios inteligentes en edificios en toda Irlanda.
La iniciativa probará nuevas formas de hacer que los edificios estén listos para la inteligencia, con el fin de responder mejor a las necesidades de los ocupantes, reducir los costos y estar listos para interactuar con una futura red de energía descarbonizada.
Dispositivos inteligentes para el control de la energía
Los propietarios voluntarios participantes en el proyecto contarán en sus viviendas con sensores que monitorizarán la temperatura, la humedad y los niveles de dióxido de carbono de sus edificios. Además, los edificios dispondrán de un contador de energía, que medirá la cantidad de energía que se utiliza en la propiedad, permitiendo hacer un seguimiento del consumo.
Por otro lado, el equipo del proyecto ayudará a los participantes a comprender mucho más sobre cómo sus edificios utilizan la energía, proporcionándoles más poder para reducir los costos de energía y tomar buenas decisiones sobre el futuro de su edificio.