El proyecto Miratar, desarrollado por la Fundación Santa María la Real y el equipo de investigación Arco de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM), está ejecutando una prueba piloto para validar un espejo interactivo. El objetivo de este proyecto es ayudar a facilitar el envejecimiento activo y saludable de las personas mayores.
La prueba piloto se está desarrollando en el centro de atención de personas mayores y/o dependientes Tercera Actividad, que la Fundación Santa María la Real gestiona en Valdelafuente (León).
El espejo interactivo ha sido diseñado por el equipo de Arco y más de una veintena de residentes de Tercera Actividad están probando este dispositivo para ver cuáles son las ventajas e inconvenientes de los espejos interactivos. Su funcionamiento es sencillo. El usuario se sitúa frente al espejo, con el apoyo de la fisioterapeuta del centro, y va realizando sencillos ejercicios. El espejo corrige los movimientos y marca unas pautas al usuario.
Mejoras en el plan de ejercicios específicos del espejo interactivo
Gracias a estas pruebas, los espejos interactivos irán mejorando, incluso podrán incorporar un plan de ejercicios específicos para personas en silla de ruedas, con el que puedan trabajar el equilibrio y la respiración, además de algún tipo de técnicas para controlar la ansiedad y el nerviosismo.
Asimismo, el espejo interactivo monitoriza los principales factores de riesgo que afectan a la salud de las personas mayores, para predecir y mitigar riesgos. Su puesta en marcha ha sido posible gracias al convenio de colaboración entre Tercera Actividad y el Departamento de Tecnologías y Sistemas de Información de la Universidad de Castilla-La Mancha en el Campus de Ciudad Real.