La Alianza Wi-Fi ha publicado los resultados del estudio ‘Requisitos del espectro wifi’, que reflejan que Europa no podría cumplir con su objetivo de ofrecer conectividad de 1 Gbps en todos los hogares de la UE de aquí a 2030. Con el espectro limitado disponible actualmente para wifi, sólo aproximadamente la mitad de un edificio residencial típico tendrá cobertura gigabit. Esto es debido al aumento de dispositivos conectados a wifi que generan un cuello de botella.
Los consumidores europeos dependen del wifi para la conectividad de banda ancha. Sin embargo, los gobiernos europeos dan prioridad a importantes recursos para expandir la banda ancha en todo el continente, la escasez de espectro wifi socava las inversiones y los beneficios en infraestructura gigabit.
El espectro de frecuencia evitaría la congestión de las conexiones
Con el rápido crecimiento del número de dispositivos wifi y el aumento exponencial del tráfico de datos, la congestión está degradando las conexiones de banda ancha, especialmente en áreas densamente pobladas donde dichas conexiones son más necesarias.
Mientras que otros países, como Estados Unidos, Corea del Sur y Canadá, han abordado esta cuestión habilitando la última generación de wifi en toda la banda de frecuencia de 6 GHz, los reguladores europeos siguen retrasando esta decisión crítica, privando a Europa de las capacidades y beneficios de las últimas tecnologías wifi.
Si bien el estudio se centró en escenarios residenciales, es evidente que la escasez de espectro wifi afecta de manera similar a los despliegues empresariales, reduciendo la conectividad y el potencial industrial de la banda ancha en Europa.
Asimismo, el estudio destaca que, sin el acceso wifi a un espectro de frecuencia suficiente, los objetivos de conectividad de Europa podrían no alcanzarse.