A través de las iniciativas 6G-life y 6G Future Lab Bavaria, los investigadores de la Universidad Técnica de Múnich (TUM) y la Universidad Técnica de Dresde (Alemania) están probando y desarrollando los mecanismos fundamentales de la sexta generación de comunicaciones móviles. Uno de los objetivos es establecer un sistema de comunicaciones completo con componentes suministrados exclusivamente por empresas emergentes alemanas.
Se espera que las primeras redes 6G comerciales empiecen a estar disponibles a partir de 2030. Es por ello por lo que ambas universidades están trabajando en diversas investigaciones en las que la tecnología 6G desarrollará un papel fundamental.
Uno de los temas investigados es el gemelo digital. Para transmitir datos a mayor velocidad, la tecnología 6G utiliza frecuencias más altas. Cuanto más alta sea la frecuencia, más difícil será que la señal atraviese obstáculos como paredes o puertas.
Para evitar la latencia en las comunicaciones, los dispositivos deben cambiar rápidamente de una estación base a otra. Aquí es donde entra en juego el gemelo digital, que, mediante la captura continua del entorno por parte de sensores colocados directamente en el dispositivo de comunicaciones, en las estaciones base o en el área circundante, se genera un gemelo digital actualizado dinámicamente. Esto permite al dispositivo determinar su ubicación exacta en el espacio en todo momento y en cualquier situación, y decidir si tiene sentido cambiar a otra estación base.
Transmisiones de datos sin interferencias y seguras
Las transmisiones de datos en 6G deben estar libres de interferencias y ser seguras. Para ello, los investigadores están estudiando el nivel más bajo de las comunicaciones entre ordenadores, conocido como capa física, que se encarga de la transmisión de bits de datos a través de medios físicos, como cables de cobre, fibras de vidrio u ondas de radio.
Para garantizar la seguridad de las transmisiones de datos en el ámbito cuántico, los investigadores han aplicado un enfoque de seguridad por diseño directamente a la capa física. El objetivo es hacer que los sistemas sean seguros mediante un innovador proceso de codificación modular en el que una capa de seguridad adicional mejora el mensaje con ruido artificial, minimizando el retraso temporal, o latencia, en las transmisiones de datos y, al mismo tiempo, reducir el consumo de energía.
Tecnología 6G para el ámbito sanitario
Los investigadores también trabajan en el desarrollo de una plataforma de red adaptativa para telediagnóstico y telemonitorización en el ámbito sanitario. Esta plataforma tiene como objetivo simplificar el telediagnóstico y la telemonitorización asistidos por robots. Además, permitirá al personal médico realizar de forma remota ajustes individualizados y contextuales en las aplicaciones en función del estado del paciente.
Las aplicaciones médicas se manejarán de forma remota a través de comunicaciones por radio a prueba de fallos y con una latencia mínima. Los datos capturados por varios dispositivos médicos, por ejemplo, se recopilan y procesan en un solo lugar. Para minimizar los retrasos en las transmisiones de datos, estos se procesan mientras se mueven a través de la red. Estas funciones de red se adaptan automáticamente a la situación actual.