El equipo de soporte del indicador de preparación inteligente (SRI) de la Comisión Europea ha mostrado los resultados de un caso de estudio de un centro de salud en Eslovenia, donde se realizó la evaluación del SRI, como parte del proyecto TIMEPAC.
Construido en el año 1980, el edificio dispone de 3.630 m2 y tuvo una renovación energética integral en 2019. Las principales características técnicas del edificio son un consumo eléctrico de 73 kWh/m2 al año, posee una conexión a la red de calefacción urbana local con un consumo de 77 kWh/m2 al año y dispone de bombas de calor para producción de agua caliente sanitaria (ACS). Además, el edificio tiene un sistema moderno de gestión energética y varias unidades de sistemas repartidas en todo el edificio.
Para llevar a cabo la evaluación del indicador de preparación inteligente, se implementaron todos los dominios técnicos abordados por el SRI, a excepción de la carga de vehículos eléctricos.
Puntuación general del SRI
La evaluación del SRI ha dado una puntuación general del 18%. En el caso de las puntuaciones por criterio de impacto, la eficiencia energética (35%), la comodidad (27%) y la salud, bienestar y accesibilidad (25%) son las que mayor puntuación han tenido, mientras que el mantenimiento y predicción de averías, y la flexibilidad y almacenamiento de energía, han obtenido una puntuación del 7% y 4%, respectivamente.
Respecto a las puntuaciones por dominios técnicos, la ventilación (26%), la calefacción (25%) y la electricidad (22%) son los dominios con mayor puntuación. Sin embargo, el enfriamiento, la iluminación y la envolvente dinámica del edificio son los dominios con peor valoración, un 0%.
En base a estos resultados, los aspectos que impactan positivamente en la evaluación son el control individual de la calefacción por habitación, el control de la bomba de velocidad variable para la calefacción, la prevención del sobrecalentamiento de la ventilación mediante la modulación o derivación de la recuperación de calor basada en sensores en el escape de aire, así como el control de flujo de aire en múltiples etapas a nivel del manipulador de aire.
También han sido favorables el sistema moderno de gestión energética que recopila y analiza los datos de monitorización de sensores y medidores; la información en tiempo real sobre el consumo eléctrico del edificio y la indicación central de averías y alarmas para sistema de iluminación, HVAC y ACS.
Aspectos a mejorar en el edificio
Según el estudio, para conseguir que el edificio pase de una puntuación general del SRI del 18% al 51%, es necesario mejorar diferentes sistemas, como actualizar el sistema de gestión energética instalado con funcionalidades de respuesta a la demanda y retroalimentación para los ocupantes, y renovar el sistema de iluminación y sistemas de control avanzados.
Por último, se aconseja instalar energía fotovoltaica para generar electricidad para su autoconsumo, un sistema de baterías para la gestión de la carga máxima, y mejorar el suministro de emergencia y la optimización de la generación de electricidad fotovoltaica.