La realidad virtual se ha convertido en una herramienta clave para el sector industrial y empresarial, ya que permite a las empresas desarrollar o testear productos, servicios o entornos en cualquier fase del ciclo de desarrollo, probando la adecuación de los mismos a través de la interacción virtual de la persona usuaria con estos. En este contexto, el Instituto de Biomecánica (IBV) ha llevado a cabo en su Human Extended Reality Lab el proyecto HER, para desarrollar una nueva tecnología para la realidad virtual que permite una interacción de la persona con los elementos del entorno mediante la mera captura del movimiento del cuerpo, sin requerir el uso de controladores o mandos.

Según los investigadores, a través de un algoritmo avanzado de monitorización de la persona, el sistema es capaz de capturar con precisión los movimientos y gestos de ésta, permitiendo una interacción más intuitiva y natural con el entorno virtual, como lo haría si estuviese en un entorno real. De esta forma, es posible coger objetos realizando el movimiento natural de aprehensión con la mano, en vez de apretar un botón en un mando de control o perdiendo motricidad fina al usar guantes, tener marcadores adheridos, etc.
Esta tecnología permite un salto sustancial en la evaluación de la interacción persona-producto/entorno y resulta esencial en un ámbito como el de la movilidad, facilitando el análisis de soluciones que impactan la infraestructura urbana, tanto estética como funcionalmente, desde fases muy tempranas de su concepción.
Human Extended Reality Lab, un entorno de investigación del IBV
Este avance ha sido desarrollado en el Human Extended Reality Lab del IBV, un entorno avanzado de investigación donde, a través de tecnologías como la realidad virtual, la realidad mixta o la realidad aumentada, unidas al uso de la inteligencia artificial, se puede emular cualquier escenario de la vida de las personas.
Esta instalación permite a empresas y administraciones testear productos, servicios o entornos con las propias personas usuarias, desde fases tempranas de su diseño y desarrollo, probando la adecuación de los mismos, caracterizar el proceso, la interacción o valorar su aceptación a través de una experiencia virtual.